TIJUANA B.C. El
desarrollo e impartición del Taller de Prevención de Conductas Delictivas y de
alto riesgo, que tallerístas del Instituto Regional de Investigaciones Sobre
Prevención y Participación Ciudadana en Baja California, A. C. llevó acabo los pasados meses en el
municipio de Tijuana, Baja California. Tuvo como objetivos principales orientar
a jóvenes y niños de nivel Secundaria, sobre los diferentes factores y
situaciones, que provocan a cierto individuo a conducirse de un modo no deseado
por la sociedad o fuera de lo que las leyes marcan, considerando de suma importancia
para su pleno desarrollo el tener herramientas que ayuden en la prevención de las
conductas no deseadas o delictivas en el caso de los adultos.
"Cada
grupo atendido de jóvenes sabe que la adolescencia es una etapa pasajera en la
que se inicia la autonomía e independencia de los futuros adultos, esta
necesidad de independencia influye en la
práctica de comportamientos novedosos y de poco riesgo. Es normal encontrar
conductas con ciertos riesgos en los adolescentes, pero es necesario
que quienes suponen sus figuras de autoridad supervisen dichos comportamientos,
porque en un momento determinado ese riesgo se vuelve inminente y va en contra
de la integridad, y sano crecimiento de los jóvenes", señalaron talleristas de IRIS Prevencion y Participacion Ciudadana.
Los preadolescentes problemáticos, con
dificultades en el comportamiento y con un historial de conductas difíciles en
el seno familiar y escolar, son los más expuestos a buscar un estilo de vida en riesgo,
situaciones que muchas veces ellos mismos minimizan.
A traves de los talleres impartidos, los jóvenes aprendieron a
detectar las situaciones riesgosas y reconocer como adolescentes que
requieren de una mayor supervisión, sin caer en el exceso de control.
Los adolescentes saben que
entran en una etapa de mayor autonomía pudiendo repercutir en excesos y en
comportamientos que implican mayor riesgo que los que normalmente realizan
otros adolescentes de su misma edad. Esta autonomía sin supervisión puede
suponer un riesgo para su persona, para otros y para el entorno social, ya que
la falta de supervisión adulta facilita que realicen conductas que pueden
perjudicar a uno mismo u a otros.
"Es el momento de supervisar conductas y
observar el tiempo que dedican a estas actividades, pues implica la exposición
a conductas de riesgo en los inicios de la adolescencia: como fumar, beber
alcohol, primeras relaciones amorosas y sexuales sin protección, o conductas que conllevan mayores riesgos,
como es probar sustancias tóxicas que no son ilegales, juegos de azar, conducción irresponsable" comento uno de los especialistas.
Durante la exposicion de los diversos contenidos tambien se
les explicó a los jóvenes asistentes que los accidentes de tráfico son la
primera causa de mortalidad en la adolescencia y se producen por realizar conductas
de riesgo, como el consumo de alcohol y drogas.
Muchos jóvenes y niños están
expuestos a muy tempranas edades a situaciones que por falta de madurez no
logran discernir adecuadamente aquellas que son nocivas para su salud física,
mental, y un sano crecimiento por ello las psicólogas que impartieron dicho
taller les brindaron no solo los conocimientos sino el desarrollo de
herramientas y habilidades que les ayudará a ampliar mecanismos de defensa y
rehusar asertivamente sin confrontación la presión de amigos o adultos.
Comentarios
Publicar un comentario
Agradecemos su mensaje y participacion. Gracias por ayudarnos a mejorar